martes, 27 de octubre de 2009

¡A rodar!


Me encanta soñar. Es una de mis debilidades. Desde chiquita, soñaba despierta, en cualquier lugar, en cualquier momento; siempre estaba imaginando cosas, historias, momentos.

Ponele, ahora mismo estoy soñando con un auto. Un fusquita descapotable rojo. Reluciente, con las gomas recién infladas. De segunda mano, pero entero.


Me imagino subiéndome al autito, bajando la capota. El sol está alto, el cielo despejado, hay una brisa cálida que mueve las hojas de los árboles. Estamos solos, él y yo. Es fin de semana, de esos fines de semana únicos. Estoy cansada pero no me importa. Hay algo que tengo que hacer, un lugar a dónde llegar. Pero por primera vez, el tiempo no me corre. Miro mi muñeca por reflejo, pero solo veo piel. Y se siente bien.

Pongo la radio al mango. Empiezo a sentir el sol en la cara. Quema, pero es una linda sensación. La llave acciona el arranque. El motor responde inmediatamente, y el auto vibra de expectación.
No sabemos a dónde vamos, pero eso no nos importa. Está ansioso, como yo.

Nos preparamos para un viaje largo. Es un enigma qué nos deparará el camino, pero estamos listos para lo que venga. No hay señales de tránsito, se recorre a puro instinto, pero nunca en primera. No existe seguro contra daños. No existe el miedo, no existen los retornos.


Salgo de la estación; mi auto tiene el tanque lleno de nafta y la ruta por delante.

¡A rodar!



Banda sonora: "I gotta feeling" - Black Eyed Peas and David Guetta

jueves, 22 de octubre de 2009

SI


Si, porque no debemos olvidar.

Si, por los hijos que no pudieron ver crecer.

Si, por los nietos que no vieron nacer.

Si, por la identidad, por la pluralidad de ideas.

Si, por el Nunca Más.

Si, por la posiblidad de enmedar un error de 22 años.

Si, por la justicia.


Si, por la memoria.

Si, por la posibilidad de crecer como sociedad.

Si, porque estamos en deuda.

Si, por la verdad.


Si, por ellos, por nosotros y por los que vendrán.

Si, para que, por fin, puedan descansar en paz.


"Pink gets me high as a kite/
And I think everything is going to be all right..." Aerosmith




martes, 20 de octubre de 2009

Sala de espera



















- ¡Pero qué tiempo loco!

- Es cierto, salí desprevenida y me mojé toda.

- Es el cambio climático, el mundo está entrando en la menopausia. ¿Cómo está Juanita?

- Ay, Juanita, Juanita... es un dolor de cabeza. No sé cuál es el problema pero
me estoy poniendo algo nerviosa...

- ¿Qué le pasa?

- Imaginate, ya pasó los 25 ¡y sigue soltera!. Una botija buena, prolija, medio feíta
pero trabajadora como ella sola...

- Pocha, Pocha, no es para tanto...

- ¡Cómo que no! Me preocupa su reloj biológico..

- Seguro que todavía tiene cuerda para rato, ¡es joven aún!

- Si, pero el tiempo pasa tan rápido... Tota, yo a su edad ya tenía cuatro hijos y
dos, iban a la escuela... Dirás que los tiempos han cambiado, pero ¿tanto?

- Para mi que tiene un as en la manga y no te cuenta...

- Puede ser, pero viste que ya de chiquita era medio quedadita...

- No te preocupes más de la cuenta, ¡te va a subir la presión!

- Si, si. Últimamente, la tengo por las nubes. Cuando me enteré que la hija de
Chola se iba casar, hice un pico de 22... Yo le digo, arreglate Juanita, pintate
un poco, ponete tacos y polleras. ¡Si hasta parece un varoncito, todo el día
mirando fútbol, de championes y vaqueros rotos!

- Bueno, Pocha, me toca pasar. Quedate tranquila, relajate, la botija va a
conseguir algo.

- ¡Dios te oiga, Tota! ¡Un saludo para el Tito!

- Gracias, Pochita, ¡otro para el Cacho! A ver cuando nos juntamos todos para
un asadito...


Que nunca te pase.... ¡Ser Juanita!

lunes, 19 de octubre de 2009

domingo, 18 de octubre de 2009

Una historia que merece ser contada

Tito tiene 33 años y vive en el barrio 7 de diciembre, por Millán, pasando Garzón. Tito es un uruguayo más, que por las vueltas de la vida, vive con poco, y a veces, con menos que eso.

Hace tres meses, Tito encontró a Carmen y a sus dos hijos, viviendo en las vías del tren. Y en un acto de generosidad extrema, los llevó a vivir a su casa, junto a su mujer y su hijo Lionel, de tres años.


Ayer estuvimos en el barrio 7 de diciembre con la fundación Un Techo para mi País, que determinó que Carmen, de 63 años, merecía tener su
casa.

Cuando llegamos, Tito nos estaba esperando en la entrada, con tantas ganas y buena disposición, que nos hizo entender realmente lo que significaba para ellos que un
grupo de personas ajenas a su realidad fueran a darles una mano. Y arrancamos a construir. Tito estuvo con nosotros todo el tiempo, así como el hijo menor de Carmen, que nos traía las piedras necesarias para cimentar firmemente los pilotes que sostendrían su casa.

Cuando paramos para almorzar, empezamos a
conocer bien la historia de Tito. Es jubilado por enfermedad. Era limpiador de vidrios de edificios pero le diagnosticaron falta de dos discos vertebrales a nivel torácico y no pudo seguir trabajando para sustentar a su familia. "Es una enfermedad perra, si te dejás caer, no te levantás". "Cada vez que me duele la espalda, me digo, no me duele, no me duele, y sigo". Tito trabajó codo a codo con nosotros, haciendo pozos, trayendo piedras, pilotes y todo lo que necesitábamos. A la hora de la merienda, su señora nos hizo pizza.

Puede sonar a lugar común, pero la generosidad de los que casi no tienen nada, te hace reflexionar, te hace pensar un poco sobre tu vida y tus acciones. Te devuelve a tu lugar.

Para mí, fue un honor haber conocido a Tito y a Carmen. Fue un orgullo haber colaborado p
ara poner el piso de su nuevo hogar. Y aunque el trabajo fue duro, el suelo estaba anegado, el sol nos pegaba en la cabeza y el barro nos llegaba a las rodillas, cuando a las cinco de la tarde pusimos el último clavo del día y nos sentamos en ese piso, realmente sentí que todo iba a estar bien. Y la sonrisa dibujada en mi cara cansada, era el reflejo de las sonrisas de todos mis compañeros.


viernes, 16 de octubre de 2009

De todo un poco...

Un poco loca
Un poco cuerda
Un poco aburrida
Un poco entretenida
Un poco sola...

Un poco caída
Un poco arriba
Un poco seria
Un poco gila
Un poco suelta
Un poco retenida
Un poco derrotada...

Pero jamás vencida.

"loco un poco nada más, casi parecés normal,
pero en la mirada ocultás algo detrás
simulando, sonriendo, sin saber que estás diciendo,

sucia la conciencia pero claro el provenir
porque ya está por venir..." Turf

martes, 13 de octubre de 2009

Camboya.com.uy

Anoche me quedé despierta hasta tarde (para variar). Y enganché "Buscadores", versión trasnoche, en canal 5. Después de volver a prometerme a mi misma que voy a poner cable en casa y de putear a Gorzy un rato (desestresa bastante), me puse a escuchar.
Un televidente envió un mail avisando lo que el "malo" de Mauro Viale (periodista argentino más conocido como el gil que se dejó pegar por un gordo en televisión en vivo) había dicho con respecto a Montevideo en la antesala de EL partido: "Montevideo va a ser como Camboya, les recomiendo que no vayan al Centenario".
Tratemos de adaptar ese concepto a nuestro país:

  • Si nosotros somos Camboya, eso los convierte a ustedes en Tailandia.
  • Si somos Camboya, en cualquier momento nos cae Angelina Jolie en un cante y se nos lleva dos o tres botijas para USA (chupen argentinos).
  • Nuestras tormentas no son "sudestadas", son tifones (mucho más paquetes).
  • Si esto es Camboya, pueden ir olvidándose de pedir un chivito en Punta, porque acá comemos tarántulas fritas.
  • Siguiendo esa misma línea, cuando compren cientos de hectáreas en José Ignacio, vayan pensando en construir el rancho tierra adentro, porque el temita con los tsunamis todavía no lo tenemos bien resuelto...


De cualquier manera, los hermanos sean unidos. Para bien o para mal. Aunque nos corten los puentes, aunque les digamos "ladrones del primero al último", aunque digan que Gardel es argentino, aunque les hayamos mandado a Natalia Oreiro; a pesar de todo eso, en el fondo nos queremos.


¿Un bocadito para el camino?



(No paré de gritar mientras colgaba esta foto. ¡Por qué carajo no comerán saltamontes, ranas o ratones fritos, los muy hijos de puta!)

lunes, 12 de octubre de 2009

Usar con precaución



Deberían venir con ese cartel tatuado en la frente. Deberían tener unos genes especiales que codifiquen ese cartel de advertencia. Porque una cree que los sabe manejar, pero en realidad, no. Y al parecer, son como la nitroglicerina: te pueden llegar a explotar en la cara si los movés mucho.
Como dijo Einstein: "Dios no juega a los dados con el mundo". Para mí, y con todo respeto para con el genio de la relatividad, Dios juega al "strip poker" con nosotras. Lo malo es que el Viejo es terrible timbero y nos gana todas las manos. Cuando queremos acordar, estamos en pelotas frente a la mesa, con una mano atrás y otra adelante, y nos toca volver a casa en el 370.
Ojo, acá no hay resentimiento. Para nada. ¡Qué esperanza! ¡Faltaba más!. Seríamos demasiado injustas si no estuviéramos eternamente agradecidas por la histeria, los cambios de humor, las demostraciones de cariño seguidas de la frialdad extrema, las indecisiones, los "no sos vos, soy yo", los partidos de fútbol 5, los "nos vemos" de mentira, los "te llamo", los "portate bien", los "cuidate", los "sos una mina re macanuda y te aprecio pila, pero...."y los "vos te merecés algo mejor que esto".
Gracias, gracias, gracias. Por lo menos, nosotras podemos echarle la culpa a la menstruación. ¿Cuál es vuestra excusa? ¿Ehhhhhh?

PARTICIPE POR UN PLASMA PARA VER A URUGUAY!
Esta entrada es:
  1. Muy feminista
  2. Muy hormonal
  3. No sabe/no contesta

viernes, 9 de octubre de 2009

Preguntas y respuestas existenciales II


N.A: No es un refrito. Tengan paciencia conmigo. Ya ni sé que escribir.

  1. ¿Me quedo o me voy?
  2. ¿Exploto o imploto?
  3. ¿Escribo o borro?
  4. ¿Tele o compu?
  5. ¿Cigarros o gimnasia?
  6. ¿Rambla o Parque?
  7. ¿MSN o ICQ?
  8. ¿El Topo Gigio o Ultratón?
  9. ¿Insomio o diazepam?
  10. ¿Jaque mate o tablas?
  1. Si me quedo, me deprimo; si me voy, por lo menos me estoy moviendo.
  2. Imploto. Seguro. Esa soy yo. No me gusta salpicar.
  3. Debería borrar más. Y dejar de escribir también. Pregunta capciosa, si las hay. El pez, por la boca muere.
  4. No tengo cable. ¿No es obvia esa pregunta?
  5. Hace dos semanas, gimnasia. Hoy, con dos cuartos de pulmones menos, decido... cigarros. Como fumo sentada, puedo acomodar mejor el pulmotor (que también sirve para poner el cenicero).
  6. Parque. El Chino sigue firme ahí. El Chino usa Rexona. El Chino no te abandona.
  7. ICQ. ¡Qué épocas! Mis amigos eran holandeses.
  8. Ultratón. Por lo menos, es un sobreviviente.
  9. ¿A vos qué te parece? ¿Ehh? ¿Ehhhhhhh?
  10. No me quedan jugadas. No tengo más estrategias. Me queda un peón para defenderme del ataque. Quedamos solos en el tablero... y acabás de vencer a mi Rey. Con poco esfuerzo. Sin intención.
Banda sonora:
"Tan Lejos", No te va gustar.
"Complicando todo", Vieja Historia.


(Si, es para vos)

miércoles, 7 de octubre de 2009

Hoy

Si hoy sonrío, ¿es porque ayer lloré?
Si hoy miro, ¿es porque ayer cerré los ojos?
Si hoy camino, ¿es porque ayer me inmovilicé?
Si hoy estoy, ¿es porque ayer falté?
Si hoy callo, ¿es porque ayer hablé?
Si hoy no puedo dormir, ¿es porque ayer soñé?
Si hoy afirmo, ¿es porque ayer dudé?
Si hoy grito, ¿es porque ayer susurré?
Si hoy recuerdo, ¿es porque mañana olvidaré?



..."Give me reason , but don`t give me choice, `cause I`ll just make the same mistake, again"... James Blunt

martes, 6 de octubre de 2009

El negocio familiar


Quizás muchos no lo sepan, pero tengo un tío. Un tío muy especial. Nosotros, los de la familia, lo llamamos el Tío Lucy.

Lamentablemente, el tío vive medio lejos, pero siempre nos acordamos de él. Yo soy su sobrina preferida, siempre me lo dice cuando lo voy a visitar... bastante seguido, por suerte. En una de esas visitas, el tío me propuso que comenzaramos el negocio familiar. Cuando me contó la idea, me entusiasmé mucho porque me creí muy capaz para la tarea. Obviamente, el tío sabe más por viejo que por Diablo, así que seguramente ya me había sacado la ficha hace rato.


Con ahínco, nos pusimos manos a la obra y redecoramos el local. Una pintadita ligera (el azufre generalmente, destruye bastante rápido los tintes, así que lo tenemos que retocar bastante seguido), trajimos unas mesas y sillas de hierro (lamentablemente,el plástico no aguantó el calor) y después de unas lecciones suyas en persona, el tío me dejó a cargo de la Pymes.


Hoy en día, puedo decir que el tío está muy orgulloso del servicio que brindamos. Nos llaman de fiestas, cumpleaños de quince, casamientos y bar mitzvah (nosotros nos metemos en todo, no hay religión que nos detenga).


El negocio familiar... ¡medio tanque, brasas y almas humanas!


(Por contrataciones, comunicarse con: laparrilladeltiolucy@elinfiernoquemapila.com.uy)

lunes, 5 de octubre de 2009

A hard night´s day


Domingo de mañana. Me levanto pocas horas después de haberme acostado con la cabeza latiendo cual bombo de la Catalina. Miro al costado y el que se acostó junto a mí ya no está.

Me lavo la cara y me miro al espejo. Paupérrimo.
Luego del Sertal®, Perifar® y cremas varias que arreglen lo visual, vuelvo a ser presentable*. Me lavo los dientes para sacar el gusto a resaca y me replancho el pelo. Ropa cómoda pero linda, championes, lentes de sol (fundamental), botellita de agua en mano y a la calle. Mientras camino a la feria para encontrarme con mi hermana, empiezan a aparecer visiones de la noche anterior. Algo confusas, fuera de órden cronológico, pero divertidas todas. Amigas, amigos, hombres que no eran deseados, hombres que sí, alumnos? Uy! Mejor no recordemos más.

Luego de la feria me espera almuerzo familiar, mate con amigas, y terminar un trabajo para el lunes. Cumplo con todo a gusto.

Aunque a veces es difícil el equilibrio, necesito de ambos. No sería yo de otra forma.
Tirar la chancleta el sábado de noche, volver a ponérsela el domingo.


"Oscila mi ánimo como un vaivén/paso de ser un huracán a un maestro zen/a veces un volcán con el poder de superman/y después ya ven, soy clark kent" -CDN/Bipolar



*gracias industria farmacéutica

Lunes lluvioso

Ocasionalmente, las imágenes no necesitan palabras...






Impacientes Anónimos


Supongo que alguna vez habrán escuchado este dicho: “Llegué tarde al reparto de….”.

A mi se me rompió el despertador varias veces. Llegué tarde al reparto de belleza, de sentido común y sobre todo, al reparto de paciencia.

Soy una botija sin paciencia; nací así y moriré así (rápido, por impaciente).

Por ejemplo, en el laburo. Muchas reacciones dicen: “calentar en baño de agua hasta evaporación completa”. Obviamente, es una tarea que requiere paciencia. Entonces, ¿qué hago yo? Pongo el vaso o matraz directo al fuego. Claro que si. Hasta que se quema, empieza a saltar su contenido hacia afuera, se quiebra el vidrio y se forma una masa negra carbonizada en el fondo. Cosas que me pasan.

Otro ejemplo (el detonante de esta historia corta): compré el repuesto (barato) del polvo para las patitas. Viene en un sobrecito todo coqueto pero inmanejable. Pero como buena pobre, yo tengo el envase del único polvo pédico caro que me compré hace nueve años y que sigo usando para hacerme la linda en el gimnasio. Todos sabrán que el polvo pédico tiene esa tendencia a la no fluidez, se apelotona, se junta, caen tres granitos y después, la bomba completa de polvo. Pico angosto, bolsa grande. Resultado, la mitad del contenido al piso. ¿Por qué? Por impaciente. Si fuera un ser humano paciente, me hubiese sentado con una cucharita de té y hubiese pasado el polvo, de a poquito, al frasco, evitando la debacle blanca que voló por todo el apartamento. Estuve los siguientes diez minutos de mi vida, en cuatro patas, juntando todo el polvo de mierda que se dispersó como nieve porque yo tenía la ventana abierta aunque afuera se estaba por venir un tornado F-5. Nuevamente, cosas que me pasan. Cosas como colgar la computadora por apretar cuarenta y cinco veces el mismo botón, quemar las tortas cuando las hago al horno, abrir el microondas cada diez segundos para ver si se calentó la comida, mirar el celular sesenta veces por segundo para ver si me contestó, comprar siempre menos de cinco cosas en el supermercado para pasar por la caja rápida, caminar cinco paradas para tomarme el ómnibus y así llegar antes (las veces que no pasa el bondi cuando estoy a medio camino entre dos paradas), bajar seis pisos por escalera cuando el ascensor demora dos segundos, entre otras.

Impaciente, impaciente, impaciente. Dicen que, a veces, la paciencia llega con la edad… pero, ¿falta mucho?.

domingo, 4 de octubre de 2009

Maestra de escuela...


Ya saben mi punto de vista sobre las salidas nocturnas. Una se siente casi sapo de otro pozo, rodeada de la manada de pre púberes que se creen los nuevos dioses del universo. Chiquito, tal vez mamá te apretó bastante las tiritas del pañal porque creo que dejaste de recibir sangre a ese remedo de cerebro que hace que tu cabeza no salga volando, cual globo de helio.
En fin, todo sucedió en la puerta del boliche, cuando mis amigas y yo estabamos fumando el pucho de la descarga. Mucho malhumor de mi parte. Carita de culo a full (no me cuesta ni un poquito). En ese momento, un botijita se nos acerca con un desodorante roll on en la mano. Si, si, si. Cuán idiota podés ser. Nosotras, viejas guerreras de la noche, la vimos venir. El cristiano comenzó a charlar y a tratar de ganarnos con su simpatía (?). Cuando vio que no iba a llegar muy lejos, sacó a relucir su faceta de "macho resentido por cortada de rostro frente a los amigos":
El pajero: -¿Qué es lo que quieren?
Nosotras: (silencio)
El pajero: -Plata no tengo, eso es lo que quieren, ¿verdad?. Plata solamente, bueno, yo plata
no tengo.
En ese momento, me tuve que hacer cargo de la situación. Con voz de maestra dando un correctivo a un alumno con problemas de conducta, tuve que poner al pichoncito en su lugar. Y puedo decir, orgullosa, que lo logré. Al entrar al boliche, frente a la cara de estupor de todos los presentes (que eran muchos, gracias a Dios), lo oímos mascullar un tímido: "Discúlpenme".
¡Nadie me dice prostituta y por nada! Eso cuesta $200 (más IVA).

sábado, 3 de octubre de 2009

La próxima sale.....



  • La próxima, seguro.
  • Es solo cuestión de esperar.
  • Todo llega en la vida.
  • Cuando estás prestando menos atención, ahí es cuando sale.
  • ¡Sos tan joven!
  • No entiendo cuál es el problema contigo.
  • ¡Sos tan inteligente!
  • Te está esperando ahí.
  • Ya te va a llamar.
  • No te desesperes, te queda mucho trecho por recorrer.
  • ¡Sos tan preciosa!
  • Ellos se lo pierden.
  • Ya va a llegar.
  • Un tropezón no es caída.
  • ¡Upa la la!
  • Mirá el vaso medio lleno y no medio vacío, pesimista.
  • Más se perdió en la guerra.
  • ¡Así no hacemos patria!
  • ¡Qué cosita che!
  • No aprendiste nada.
  • ¡Jodete por boluda!
  • No se puede hablar contigo.

jueves, 1 de octubre de 2009

Octubre



Llegamos a octubre y con mi insomnio a cuestas, quiero inaugurar este mes.
Quiero sol, quiero verano, quiero Rambla, quiero pasto del Parque, quiero sentarme a la sombra del Chino y que el día sea más largo para disfrutar más de mis amigos. Quiero todo... ¿Está mal?
Feliz octubre para todos, que este mes sea diez veces mejor que el anterior.

Transporte Colectivo Urbano



















¡Qué nunca nos falte! Es la dosis necesaria de "pueblo" que todos necesitamos para mantener los pies en la tierra. Quien no haya experimentado la sensación sublime de subirse a un ómnibus montevideano un lunes a las ocho de la mañana o un viernes a las seis de la tarde, no puede llamarse a si mismo, montevideano.

Si, a ustedes, poseedores de autos que no frenan en los semáforos, les estoy hablando. No se hagan los desentendidos... cuánto conocimiento de la dinámica ciudadana les falta.
¡Cuántos paros se han perdido! ¡Cuántas caminatas bajo la lluvia o bajo el sol de verano (ese que te parte el cráneo en cuatro pedazos) no han vivido!. Les tengo lástima. El calor humano que emanan las cincuenta personas colgadas de los caños en los pasillos cuando llueve y estamos todos juntitos, bien pegaditos, es algo que te acaricia el alma. Las puteadas y las caras de culo cuando no podés levitar hasta la puerta trasera y tenés que rozar tu humanidad contra la del resto de la gente.... la gloria absoluta.

Tengo que confesar mi adicción. Me encantan los bocinazos, los insultos del chofer, las viejas, los vendedores de incienso (que te dan alergia con solo verlos), los vendedores de caramelos de "eucalito", medias, fundas para celulares, libros de tarot, horóscopos, cortauñas, pinzas de cejas, cotonetes, curitas, ondulines, "icekis", Hamlet; los cantantes buenos y los malos (más aún), los inspectores, los liceales, los gurises que lloran sin parar, los payasos, los contadores de chistes, los botijas de Remar, los desempleados. Soy adicta a ellos y a todo el resto de la fauna urbana que circula en el Transporte Colectivo Urbano.